I was stupid for letting you go...

I was stupid for letting you go...

lunes, 18 de febrero de 2013

Capítulo 10. Solo amigos, ¿lo pillas?

Narra Ane
Estúpido niñato, que me ha tirado al suelo ¿es que acaso no puede ver por donde va o qué?
Camino hacia casa pensando en cuánto idiota hay por la vida, que no sabe ni caminar y te empuja y luego encima va y te habla como si nada hubiera pasado. Enorme gilipollas...
Aunque ese mismo chico, el rubio de mejillas sonrosadas, el de ojos azules como un cielo despejado de primavera, es simplemente como ¡guau!, mi corazón parecía el batir de alas de un colibrí en cuanto le he visto. Casi puedo decir que me sonrojo solo de pensar en él, aparte de que una sonrisa involuntaria sale de mis labios. Pero no, no puedo enamorarme otra vez, no, me niego, solo traen dolor, dolor sufrimiento, traición. Pero debo de admitir que tiene cara de majo, de agradable y... es bastante... mono...
Alguien interrumpe mis pensamientos cogiéndome de la mano y haciéndome dar la vuelta, aunque no con violencia, sino más bien con amabilidad y delicadeza.

--Hola-dice él, sonriente

Su sonrisa... es... es... indescriptible, y no me refiero a sus dientes, que están algo descolocados, es su sonrisa como tal, es lo que transmite con ella, felicidad, pureza, inocencia, amabilidad, dulzura, es... perfecta.

--Lo siento, ya te he dicho que no quería tirarte-dice mirándome con algo de arrepentimiento.
--No importa-respondo con fingida indiferencia antes de seguir mi camino.
--Oye ¿qué te he hecho para que me trates así?-pregunta el pobre chico andando detrás mía, esperando a que le dé una buena razón.
--Nada.
--¿Entonces?
--Quiero irme a casa, solo es eso.
--Venga, ven con nosotros, no te comeremos, aunque tengo mucho hambre, no prometo nada-dice de nuevo con esa amigable sonrisa.

No puedo evitar reír ante su comentario, y con ello que me pare en medio de la calle a pensar en los pros y contras de que me vuelva a casa del dichoso y puñetero Styles con este chico y con sus amigos, que uno de ellos me pone enferma solo de verlo y ni siquiera sé porqué, solo tiene cara de borde y no me da la gana tener que aguantar a alguien más borde que yo. Pero por otra parte, pero la cara de este chico, con esa simpática sonrisa y ojos suplicantes porque le acompañe, aunque tampoco sé qué mosca le ha picado conmigo, quizá... esté intentando ligar conmigo... No, no creo que sea eso, menos después de como le he tratado, tal vez es que sea amable con todo el mundo por naturaleza...

--Está bien...-admito finalmente en un suspiro, haciendo que su sonrisa de dientes descolocados se ensanche triunfante por conseguir su propósito de que vaya con él.

En un angosto silencio, nos encaminamos a casa de Styles, yo aún poco convencida de que sea una buena idea, pero supongo que... bueno, supongo que me apetece pasar tiempo que este rubito tan tierno.

--Oye...-dice en un tono bajo y lleno de nervios, interrumpiendo el silencio por fin-yo...yo...me preguntaba....si...si tú-sigue hablando entre balbuceos, mientras se pone más rojo que un tomate, cosa que le hace parecer más adorable aún-tú querrías...venir conmigo...al...al...cine...Yo invito está claro y tú eliges la película-añade con más nervios aún, mirándome a los ojos y haciéndome sentir pequeña en esa inmensidad azul.
--Lo siento, pero no-respondo simplemente, tratando de no sonar dura con el pobre chico.
--Oh...vale-responde en un tono apagado y claramente desanimado y avergonzado, al tiempo que agacha la cabeza mirando a sus zapatos mientras seguimos andando por la solitaria calle..
--No es por ti...-trato de decir, ya que me siento culpable porque se lo haya tomado tan mal, pero me interrumpe.
--Ya, ya lo sé, "No es por ti, es por mí"-dice en un tono algo sarcástico aún sin mirarme a la cara.
--No, enserio eres un chico fantástico, pero no quiero novios ahora ¿vale?-digo tratando de no... hacerle ¿daño? ¿Enserio? ¿Ane? ¿Eres tú? ¿Qué coño te está pasando?
--Y ¿amigos? -propone aún nervioso-¿Dejarás de...odiarme?-pregunta mirándome algo esperanzado, a lo que yo no puedo evitar reír.
--Claro que sí-respondo tratando de frenar mi risa-y no te odio, eres muy... agradable-consigo decir.
--Pues es lo que parece-añade en un murmullo.
--No es eso-dice algo quejica.
--Bueno...vale-admite finalmente, dedicándome una de esas sonrisa que te cortan la respiración sin quererlo.
--No, no hagas eso, por favor-le pido notando como mis mejillas amenazan con dejarme en evidencia al ver algo tan... ¿hermoso?

Me abofeteo mentalmente solo de pensar ñoñerías y cursiladas de estúpida colegiala de película, enamorada del capitán del equipo de baloncesto.

--¿El qué?-pregunta algo confuso-¿Sonreír? Ah, ya, tengo unos dientes horribles-dice en voz algo baja-me lo dicen mucho-admite-Lo siento...
--No, no es eso-le aseguro-Tu sonrisa...es preciosa-explico algo nerviosa, notando como me mira extrañado-y si me sonríes voy a tener que decirte que sí-admito vergonzosa.

Mierda, ¿vergonzosa? ¿enserio? ¿es que ahora me gusta este tipo? Es amigo de Styles por el amor de Dios, seguro que es un idiota como él.
Pero de manera extraña él no me reprocha mi vergüenza y tan solo suelta una carcajada que suena como algo increíblemente perfecto en mis oídos, y que hace que yo también ría.

--Bueno, gracias, no me suelen decir-admite bajando su volumen de voz de nuevo, aunque con una sonrisa en la cara.

De nuevo el silencio entre nosotros dos, aunque quizás menos incómodo. ¿Cuánto se supone que he andado? No sabía que caminara tan rápido, ya que parece que nunca llegamos a casa de Harry.
Siento la mano de este chico, aún con nombre desconocido para mí, rozar la mía con cuidado, antes de agarrarla con miedo de que le suelte alguna grosería, cosa que estoy tentada a hacer, pero... que algo me impide hacerlo y me obliga a hablarle con delicadeza.


--Te he dicho que no quiero novios-digo tratando de soltarme de su agarre-No sé ni como te llamas-añado.
--Oh, perdón-se apresura a decir mientras me suelta la mano no con rapidez precisamente, dejando una pequeña chispa cuando su piel deja de hacer contacto con la mía-¿No lo sabes?-pregunta extrañado-¿No ves X Factor?
--No, no lo veo-respondo simplemente, ya que esos programas no me llaman la más mínima atención, mucho menos si tengo que ver el careto de Harry.
--Ah, que raro, lo ve muchísima gente-dice algo nervioso por mi corte-Bueno, soy Niall-se presente formalmente, de nuevo mostrándome sus dientes desordenados.
--Ane-respondo con una pequeña sonrisa.

Antes de que pueda decir nada más, él me pasa el brazo por los hombros haciendo que me pegue más a él, con mi cara en su costado, haciéndome sentir tan estúpidamente bien que hasta lo aborrezco, pero admito que es agradable y su perfume me cala hasta lo más hondo, sea la fragancia que sea, aunque también he de decir, que me pone nerviosa su constante intento de flirtear conmigo e intentar que me acerque a él. Me pone nerviosa y me alaga al mismo tiempo.

--Niall...amigos, solo amigos, ¿lo pillas?-pregunto tratando de no sonar nerviosa.
--Los amigos se abrazan, ¿no?-dice con esa preciosa sonrisa de nuevo.
--Te voy a acabar consintiendo todo si me sonríes-admito rodando los ojos, aún con su brazo rodeándome.
--Bien-confirma haciendo que se me escape una sonrisa.

Ane eres estúpida, eres estúpida, pero muy estúpida, aléjate de él antes de que te encoñes de verdad y te conviertas de nuevo en la blanda a la que pisotearon, vamos, largo de él me digo a mí misma, pero creo que no me hago caso, ya que caminamos juntos de esa manera, de nuevo en un silencio, solo que esta vez uno agradable hasta llegar frente a la casa de Harry, donde el resto nos espera.

--¡OS LO DIJE!-grita el más moreno, el que parece menos insoportable por algún motivo y que creo que se llama Zayn, ya que Martha suele hablar de ellos a veces.
--¿El que os ha dicho?-pregunto curiosa, deteniendo mi paso junto con Niall.
--Que acabaríais juntos-responde en un amargo, rancio y desagradable tono de disgusto el castaño, el que me cae mal y sinceramente no sé porqué, pero lo hace y me dan ganas de soltarle un puñetazo así sin más. Creo que se llama Liam.
--Pero no pensábamos que tan pronto-añade Martha con diversión.
--Nunca subestimes la adorabilidad de Niall-añade Zayn.
--No estamos juntos-responde Niall riendo-somos amigos y solo amigos-explica haciéndome sentir algo culpable por haberlo rechazado, provocando que de nuevo me pegue mentalmente.
--¿Lo veis? Es una estrecha-habla mi amiga con diversión, rodando sus castaños ojos.
--Oye guapa, que no soy una estrecha-respondo tratando de sonar indignada, pero o puedo evitar reír y que el resto se me unan, exceptuando al tal Liam que me mira con esa cara de borde insoportable que tiene.
--Bueno ¿entramos o qué?-pregunto al ver que estamos parados en la calle como unos idiotas.
--¿No viene Tomo?-pregunta Martha mirando a nuestro alrededor, buscando con la mirada a quien sea que sea Tommo.
--Estaba con su chica, pero vendrá enseguida a ver a Harry-responde Liam sin más.

Niall quita su brazo de mis hombros, haciéndome sentir algo... vacía, pero trato de olvidar ese sentimientos mientras veo como los chicos caminan dentro de la casa haciendo locuras de las suyas y tirándose unos encima de otros de manera quizás demasiado bestia.

--¿Quién es Tommo?-pregunto a mi amiga, pero ella tan solo me mira con los ojos como platos.
--¿Has dado calabazas al pobre Niall?-pregunta sin poder creérselo.
--Yo he preguntado antes-digo quejica.
--Respóndeme.
--Me ha pedido ir al cine con él, bueno, me ha dicho que él pagaba todo, pero que si quería ir con él y le he dicho que no ¿Qué pasa con eso?
--Si lo ha hecho es porque le gustas-dice con una pequeña sonrisa, mirándome con ternura.
--Vaya misterio-respondo en un murmullo, rodando mis ojos mostrando mi ironía y sarcasmo ante tal cosa.
--No lo entiendes-dice negando con la cabeza-Niall no se enamora así porque sí, de cualquiera, él es... especial con esas cosas.
--Bueno ¿y yo qué quieres que le haga?-pregunto ya molesta de que me esté hablando de ese temita.
--Nada, solo me parece curioso-dice encogiéndose de hombros.

Sin decir nada más entramos a la casa y subimos las escaleras hasta llegar al cuarto de Harry, donde los chicos ya están hablando con el susodicho.

--¿Y mi amor? ¿Dónde está?-pregunta un Harry sentado en la cama estirando su cuello hacia la puerta por la que acabamos de pasar Martha y yo.
--Aquí ¿no la ves?-pregunto algo extrañada, señalando a Martha y provocando que todos rían a mi costa-¿Qué he dicho?-pregunto entre molesta y confundida.
--Se refieren a Lou-me dice Martha con diversión.
--¿Lou? espera ¿te pone los cuernos y tú te ríes?-pregunto sorprendida porque alguien se pueda llevar tan bien un engaño, pero ellos tan solo ríen de nuevo, dejándome fuera de juego de su broma.
--Es su bromance, no me pone los cuernos-responde mi amiga de nuevo-son amigos y punto, pero se hacen bromas de ese estilo.
--Ah, entiendo ¿Cómo tú y yo en plan chicos?-pregunto tratando de encontrar un símil que pueda comprender.
--Sí, eso justamente-habla ella de nuevo, siendo interrumpida por el timbre de la casa.
--Bueno, ya voy yo-digo saliendo de la habitación.

Bueno, de momento no va mal la cosa, Harry no se comporta como un idiota, Zayn hace comentarios graciosos, Liam simplemente se calla y Niall me lanza miradas y sonrisas amables, pero ha dejado de tirarme los trastos. De momento no está mal el día.
Bajo las escaleras hasta llegar a la puerta de entrada, la cual abro, haciéndome quedar con la boca abierta sin poderme creer quién es la persona que se encuentra ante mis ojos después de tanto tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario